Hoy quiero compartir una receta que me traslada a mi infancia, el tiramisú. En casa de mis padres era uno de mis postres favoritos y me sigue encantando.
Ayer una de las pruebas de masterchef era el tiramisú, la verdad que a mi me pareció la prueba más fácil hasta el momento pero me sorprendió los platos que presentaron los “aspirantes” … Lo más importante del tiramisú, como decía Jordi, es la textura, la cremosidad y sólo 1 de ellos lo consiguió. Pero si sigues esta receta ya verás como te sale para que el jurado de masterchef quiera “repetir”.
Mi receta, es para que te quede ligero y cremoso es decir no es una tarta compacta y por tanto lo tienes que hacer en un recipiente donde lo vayas a servir directamente. No un molde que luego tengas que desmoldar. De hecho cada vez que voy a un restaurante y veo el tiramisú como una tarta helada o que sabe a nata, me llevo un disgusto! Nunca lleva nata ni gelatina.
Ingredientes para mi tiramisú
6 huevos
1 mascarpone de 1 kg (suelen venderse en tarrinas de 500gr)
12 cucharas de azúcar colmadas
Bizcocho Savoiardi, son como soletillas pero duras, no bizcocho blando (unas 30)
Café (2 cucharadas si es soluble o una tacita de expreso)
Azúcar 2 cucharadas para mezclar con el café
Un chorrito de cointreau o marsala (a mi me gusta más el cointreau ya que le da un toque a naranja pero no es el que lleva la receta original)
Cómo hacer esta receta?
Separa las claras de los huevos. Es importante que en las claras no caiga nada de yema ya que si no al batirlas más tarde a punto de nieve no van a subir correctamente
Con ayuda de una batidora (si es a mano con varillas, te ahorrarás el gimnasio) bate las yemas para incorporar aire, añade el azúcar y bate hasta que se quede una masa blanquecina y después incorpora el mascarpone y vuelve a mezclar
Por otro lado bate las claras a punto de nieve, es decir hasta que se cree una “espuma” tan firme que al dar la vuelta al bol las claras no se caigan.
Ahora viene el paso más importante, tienes que agregar las claras a la mezcla del queso, hazlo con una espátula y con movimientos envolventes, es decir ir girando el bol en sentido contrario a como tu mezclas con la espátula, intentando no quitarle el “aire” a las claras. Hay que mezclarlo bien pero consiguiendo mantener esa cremosidad tan importante en este postre
El café yo suelo usar nescafé descafeinado soluble ya que muchas veces es para cenar y la gente no quiere cafeína (o para niños). Pero si os gusta mucho el café, usar una taza de expreso. Es importante que esté caliente, disuelve el azúcar y añade el chorrito de licor. A mi me gusta el cointreau ya que no soy tan “fan” del café y me gusta el toque a naranja de este licor, aviso que no es cómo marca la receta original,
Ahora coge la fuente donde lo vayas a presentar. Sumerge los bizochocos en el líquido y cuando estén empezando a estar blandos presiona entre las dos manos el bizcocho para quitarle el exceso de líquido. Tampoco soporto los tiramisús chorreantes de café por todos lados!
Ve poniendo una base de bizcochos, uno al lado de otro. Una vez completada, cubre con la mezcla del queso y después otra capa de bizcochos. Yo pongo dos capas pero si queréis podéis poner más bizcocho y puedes poner menos crema y tres capas.
Mételo en la nevera y déjalo reposar (si es la noche entera mejor). Justo antes de servir espolvorea el cacao por encima. No hagas esto antes ya que enseguida se pone ”feo”. Para espolvorearlo bien, te aconsejo hacerlo con un colador.
Espero que sea un éxito y triunféis con este postre que tanto me gusta!
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